La vietnamita Bitel llegó al mercado peruano hace cinco años y, a pesar de las vicisitudes, se muestra saludable y con ganas de seguir peleando en un mercado complejo y competitivo. Mientras se prepara para sus primeras pruebas en 5G, analiza también incursionar en televisión paga como complemento de sus servicios.

Su gerente General, Phan Hoang Viet, hizo una suerte de balance del quinto cumpleaños del operador en el país y dijo haber cumplido los objetivos con los que llegó: disminuir la brecha digital entre las zonas urbanas y rurales. En sus números, en tanto, “mantenemos una salud financiera, estables, creciendo a doble dígito. Cuando llegamos necesitamos el apoyo del grupo pero ahora tenemos ingresos propios que cubren los gastos y tenemos utilidades”, dijo el ejecutivo.

Los números del mercado en Perú no son muy alentadores para los operadores de servicios móviles, con un ARPU a la baja que trajo como consecuencia un decrecimiento en la facturación el año pasado. Sin embargo, Bitel confía en su estrategia eficiente basada en la optimización de gastos y costos operativos. “Cubrimos los gastos con los ingresos”, dijo Phan Hoang Viet en declaraciones tomadas por el portal local El Comercio. Las multas “no afectan demasiado la situación financiera”, agregó.

El directivo señaló de que continuará su estrategia de precios competitivos, aunque “eso no quiere decir que vamos a hacer algo desmedido”. Según los datos del regulador, es el operador con precios más competitivos al menos el plano pospago. En tanto, se ubica en lo más bajo a la hora de hablar de calidad de servicio, un ítem en el que buscan mejorar constantemente con inversiones, deslizó. A la fecha fueron desplegados 34.600 kilómetros de fibra óptica y Bitel se posiciona como líder en cobertura 4G, de acuerdo a datos del Organismo Supervisor de la Inversión Privada en Telecomunicaciones (Osiptel).

En el plano fijo, el foco sigue puesto más en el mercado corporativo, en el que “ven una buena oportunidad”. Se mantendrá por el momento con Internet y telefonía inalámbrica mientras que piensa incursionar en la televisión paga, “pero en el futuro”. Para sus servicios fijos aprovechará, claro, la red de fibra óptica. Mientras tanto, también ha ganado la ejecución de distintos planes del gobierno, con contratos por 115 millones de soles (34 millones de dólares) solo en el primer trimestre de este año.

En el plano móvil, en tanto, la firma escala más rápido que sus competidores en market share pero se mantiene en cuarto lugar, algo que a criterio de su representante cambiará en el corto plazo. El operador se propone subir una posición y quedarse con el tercer puesto que hoy está en manos de Entel. Actualmente cuenta con una participación del 16,5 por ciento, subirá un punto más para fin de año y llegará al 20 por ciento para 2020, si se cumplen sus estimaciones.

Sus objetivos en el mundo móvil chocan con los de sus competidores. Sin siquiera pensar en Telefónica y Claro que se mantienen en el primer y segundo lugar respectivamente, Entel mantiene en alza sus inversiones en el país y sigue creciendo en cantidad de usuarios, aunque su crecimiento en términos porcentuales es menor que el que ha logrado mantener la firma vietnamita. Esta lucha entre cuatro ya generó que Virgin Mobile se alejara del mercado por resultados por debajo de lo esperado.

Con sus buenas expectativas, Bitel se prepara para probar 5G de la mano de ZTE. Esto sucederá antes de que termine el año. Mientras tanto se prepara para participar en la licitación de espectro compatible con esa tecnología. “Cuando se haga, vamos a participar. Vamos a ver cómo invertir y cuándo lanzarlo. Participaremos en 3,5 GHz con seguridad”, cerró el ejecutivo.

En el análisis de que Perú sufre con cuatro operadores, Bitel parece el más complicado de todos porque es el único que hoy no es parte del podio. Sin embargo, sus autoridades confían en que escalará la posición clave y dejará que Entel deba lidiar con ese mote. Al menos eso parece, pues ante la consulta sobre si piensan quedarse en el país, el ejecutivo fue tajante: “Sí, claro. Aquí estamos, nos gusta el Perú”.

Autor: Nicola Larocca - TeleSemana