Lima, septiembre 09 de 2024.- La educación técnica en el Perú está cobrando un protagonismo cada vez mayor en el mercado laboral y en la visión de desarrollo del país. Con un enfoque práctico y dirigido a las necesidades específicas de diversas industrias, este tipo de formación está demostrando ser un motor clave para la empleabilidad de los jóvenes peruanos. Según el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), más del 40% de los estudiantes peruanos optan por carreras técnicas, y se espera que esta cifra aumente debido a la creciente demanda de profesionales capacitados en sectores como la tecnología, la manufactura y la logística.
El estudio más reciente del Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo (MTPE) indica que los egresados de institutos técnicos tienen una tasa de empleabilidad del 65% en los primeros seis meses tras finalizar sus estudios, superando a muchos de los egresados de carreras universitarias tradicionales. Esta tendencia refleja la necesidad de revalorar la educación técnica como una vía viable y efectiva para acceder al mercado laboral. Además, el crecimiento de sectores como la construcción, telecomunicaciones y tecnología impulsa una mayor demanda de técnicos calificados, lo que fortalece la relevancia de esta formación en el Perú.
Silvana de los Heros, Presidenta de RedTec-LATAM, organización que agrupa a las principales instituciones de educación técnica de la región, resalta la importancia de este tipo de formación en el país: "La educación técnica es esencial para el desarrollo económico del Perú. Hoy en día, las empresas demandan cada vez más profesionales técnicos que puedan adaptarse rápidamente a los cambios tecnológicos y productivos. En RedTec-LATAM, estamos comprometidos en fortalecer la calidad de la educación técnica, ya que sabemos que es una herramienta poderosa para reducir la brecha de empleabilidad y generar oportunidades para más peruanos".
A pesar de estos avances, la percepción social sobre la educación técnica sigue siendo un desafío. Aún persiste la idea de que solo las carreras universitarias garantizan el éxito profesional, una visión que no refleja la realidad actual del mercado laboral. Es crucial reconocer que la formación técnica no solo permite una inserción laboral rápida y eficaz, sino que también ofrece la posibilidad de continuar estudios superiores o especializarse en áreas de alta demanda.
La revalorización de la educación técnica es una tarea conjunta que requiere de un cambio en la mentalidad de la sociedad y de las empresas, así como el compromiso del Estado para promover este tipo de educación. Es necesario reconocer el papel fundamental que los profesionales técnicos desempeñan en el desarrollo económico del país, y cómo su formación contribuye a la competitividad y sostenibilidad de diversas industrias.
Solo a través de una mayor concienciación y apoyo, podremos garantizar que más jóvenes peruanos vean en la educación técnica una opción de calidad para construir su futuro.